Familia

Caminar en el bosque fue un anhelo largamente acariciado. Cuando vivíamos en Inkoo, una pequeña villa a 56 kilómetros al Oeste de Helsinki. Una caminata diaria en compañía de mis hijos de al menos una hora tienía lugar, ahora básicamente ando en bicicleta a lo largo de la ciudad, aunque ciertamente hay diferencias resulta también muy agradable.

Seguimos sin entender mucho de la programación local y debo confesar que no entiendo mucho del idioma. Pero, a través de la red nos hemos podido allegar de toda clase de películas y ya nos adaptamos a mirar muchas en inglés. Aunque los canales del YLE tienen un programación semejante a los canales 11 y 22 de la Ciudad de México, no deja de extrañarse la buena programación de nuestros canales culturales.

La comida en un principio fue una interminable sucesión de papas al horno, a veces acompañadas por pollo, picadillo, o pescado. Guisados que son invariablemente condimentados por algún sucedáneo de chile. Ahora hemos encontrado muchos condimentos mexicanos y otros de procediencia oriental que han recuperado el sabor de nuestra comida. Aunado a eso, también hemos incorporado a nuestra dieta algunos platos y condimientos locales, además de la cosecha de chiles que cultivamos en la ventana.